DESPACIO Y CON BUENA LETRA

¡¡¡¡Que difícil es tener los papeles al día!!! Uno de los mayores y más extendidos problemas de los oficinistas y no tan oficinistas. Sí, es un engorro tener que recopilar, ordenar, clasificar, anotar, renombrar, y tantos más verbos que se nos ocurran pero que nos podrían valer para tener un poco más de claridad en nuestros enmarañados papeles. ¿Pero será necesario perder tanto tiempo en tener todo en su sitio? Desde Círculo Gacela apostamos por el orden como comienzo ante cualquier actividad.

Cuando elaboramos un plan financiero se puede preguntar uno qué tiene que ver el orden con todo esto. Pues mucho. Para hacer un plan financiero tenemos que recopilar cierta documentación necesaria para el estudio. El problema con el que nos encontramos es que muchas veces no nos llega toda la información necesaria y ello dificulta en gran medida la correcta elaboración de dicho plan. Hay aspectos básicos como el historial de cuentas de la empresa, que son imprescindibles para conocer la realidad de la compañía. Así mismo tiene que haber una correcta presentación de impuestos tanto de la sociedad como de los socios. Pero no todo son números, el aspecto cualitativo es tan relevante como el cuantitativo. Es necesario detallar las actividades de la empresa, su estructura, clientes y las previsiones de ventas e inversiones de los próximos años.

Hay que pensar que dos empresas no son iguales y por tanto siempre hay que buscar en los planes la diferencia, es decir, aquello que nos caracteriza porque al fin y al cabo las empresas son como las personas. Hay aspectos buenos y aspectos no tan buenos, pero a la hora de vendernos siempre intentamos enseñar lo que creemos que nos identifica como únicos. Esto en el mundo empresarial es definir nuestra ventaja competitiva.

Con esto tenemos los cimientos del edificio pero queda una torre por construir. Empezar por el tejado no suele ser la manera más fácil de comenzar cualquier plan. Ante todo orden, organización y la fachada para el final.

Fdo:
Las jotas